Barranquilla
Barranquilla en crisis: Bloqueos y demandas por energía eléctrica
Los bloqueos en Barranquilla se intensifican mientras los residentes exigen una solución urgente a Air-e. La frustración por la falta de energía ha llevado a la comunidad a acciones drásticas en las calles.
Los bloqueos en Barranquilla y sus alrededores continúan afectando la movilidad, mientras los manifestantes demandan respuestas inmediatas de Air-e. La interrupción del suministro eléctrico, provocada por un vendaval, ha dejado sin servicio a más de 12 barrios, desatando la ira de los ciudadanos.
Desde las primeras horas, los organizadores de las protestas han indicado que las obstrucciones no cesarán. «Los bloqueos van a continuar», se ha comunicado a los participantes, sugiriendo que la situación se mantendrá en el tiempo. Este llamado ha generado un clima de tensión y expectativas sobre el futuro de las acciones.
Las zonas críticas de la ciudad, como la entrada a Manuel Beltrán y la salida a Galapa, se han convertido en epicentros de las manifestaciones. La prolongación de los bloqueos ha complicado no solo el tránsito de personas, sino también el transporte de mercancías y servicios esenciales, generando un efecto dominó en la economía local.
La raíz de esta protesta es clara: la falta de energía. Los habitantes de San Salvador, uno de los barrios más golpeados, han permanecido sin electricidad por más de 48 horas. En una acción desesperada, los vecinos bloquearon la carrera 76, demandando que Air-e restablezca el servicio de manera urgente. La situación se ha vuelto crítica, ya que muchos alimentos están en riesgo de echarse a perder y el calor extremo ha dificultado aún más las condiciones de vida.
Donaldo Ricardo, residente de San Salvador, ha compartido su frustración con la prensa local, relatando que la comunidad ha esperado respuesta de Air-e sin éxito. Esta falta de atención ha llevado a los ciudadanos a tomar medidas más drásticas, evidenciando la falta de comunicación entre la empresa y la comunidad afectada.
Las protestas también han alcanzado a municipios cercanos, como Malambo. En Caracolí, los habitantes han bloqueado la variante que conecta con el centro urbano, reflejando un descontento generalizado por la falta de energía. Este fenómeno ha paralizado la vida cotidiana y las actividades económicas en la región.
Air-e ha señalado que se están realizando esfuerzos para restablecer el servicio, aunque reconocen las complicaciones derivadas del fenómeno natural. Sin embargo, los ciudadanos exigen respuestas más rápidas. La falta de acción efectiva por parte de la empresa ha incrementado la desesperación y la angustia en una comunidad ya afectada por la situación.
La prolongación de estos bloqueos refleja una creciente insatisfacción con la gestión de Air-e y plantea preguntas sobre la capacidad de la compañía para responder a emergencias. En medio de este caos, los ciudadanos de Barranquilla y sus alrededores siguen esperando respuestas concretas.
